viernes, 3 de septiembre de 2010

Los docentes eligimos la conduccion de Ctera

Los docentes eligieron la conducción de Ctera (fuente www.eldiariodeparana.com.ar )

Las agrupaciones de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), la Celeste y la Rojo y Negro, volvieron a medir fuerzas ayer en una elección. Los sectores en pugna militaron ayer sus propuestas a nivel nacional, luego del ajetreado proceso electoral –con denuncias de fraude, planteos judiciales y nuevas votaciones– que llevó a la Rojo y Negro a la conducción del sindicato en Entre Ríos.

Pero esta vez la tendencia se revirtió en la provincia, ya que la Lista Celeste Violeta logró revertir aquella derrota con un triunfo en las elecciones de la Central de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) al obtener 3.368 votos, contra 2.944 sufragios de la Lista Lila –a la que apoyaba la conducción provincial–, mientras que la boleta Marrón obtuvo 174 votos y la Lista Rosa-Gris-Verde sumó 173 adhesiones, según se indicó desde la Junta Electoral a EL DIARIO.Los docentes nucleados en la Celeste llevaron la boleta Celeste Violeta que propuso la reelección al frente de la Ctera de Stella Maldonado; mientras, la Rojo y Negro impulsó el voto a favor de Pedro Muñoz, dirigente de Santa Cruz, que encabezó la Lila.También hubo otras dos boletas en los 180 lugares de votación, a disposición de 25.074 docentes empadronados. Fueron la Lista Marrón, que postuló como titular de Ctera a la neuquina Graciela Frañol; y la Lista Rosa-Gris-Verde que llevó a la bonaerense Amelia García.REPRESENTACIONES.
La Lista Lila, nacida en 2007, tiene un buen desarrollo en el sur de la provincia y en Rosario. El triunfo en Agmer, a través de la Rojo y Negro, fue relevante para el sector a nivel nacional, lo que se pudo medir en los cargos que los entrerrianos ocuparon en la nómina: Norma Sánchez, de Federación, fue como candidata a secretaria Gremial en la Junta Ejecutiva Nacional; Adriana Dechat, de Concordia, fue como secretaria de Igualdad de Género; Guillermo Zampedri, de Concepción del Uruguay, como vocal titular segundo; y Orlando Sosa, de Ibicuy, fue como segundo miembro suplente de la Junta de Disciplina de la Ctera.
El crecimiento de la representación de la Rojo y Negro en la disputa nacional es inversamente proporcional a la reducción de espacios de los dirigentes de la Celeste que perdió la conducción de Agmer, después de dos décadas. Contra lo sucedido tradicionalmente, la nómina de ayer sólo llevó a un entrerriano, Juan Carlos Manzan, de Gualeguay, presidente de la delegación provincial de Osplad (la obra social docente), que fue ubicado como vocal suplente tercero. También hubo un entrerriano en la Lista Marrón: Andrés Borgetto, que ocupó la postulación a la Secretaría de Hacienda y Finanzas de la Ctera.Finalmente, la Rosa-Gris-Verde no llevó entrerrianos ni tuvo agrupaciones locales sosteniendo la propuesta pero la boleta estuvo, junto con las otras tres. DIFERENCIAS.
La Celeste, que conduce la Ctera desde los ‘90, ha sostenido buen diálogo con el Gobierno nacional. Participó activamente en los ámbitos de discusión de la nueva legislación en materia educativa, impulsada por las gestiones de Néstor Kirchner y de Cristina Fernández. Cuestiones políticas e ideológicas han sustentado este vínculo que, en lo gremial, se tradujo entre otras cosas en la rúbrica de paritarias nacionales que llegaron a buen término en la relación gremio y patrón Estado, pero que suscitaron duras críticas en distintos puntos del país, especialmente donde la Celeste no conduce los sindicatos de base, como es el caso de Entre Ríos. Esta postura, sumado al desarrollo de otros sectores, ha hecho que la clara hegemonía Celeste en todo el país se haya reblandecido ostensiblemente. Los sectores críticos, especialmente la Lila con inserción en Entre Ríos, levantan como bandera “la autonomía” de los partidos y del gobierno que es igual a la patronal en el caso de los docentes. Y en el proceso de campaña, previo a la elección de ayer, plantearon entre otros ejes de cuestionamiento a la Ctera la fragmentación del reclamo, sostenido en distintas provincias sin un aval nacional. Han cuestionado también la definición de pisos y techos salariales, convenidos a nivel nacional, que le ha puesto corset a los reclamos en las provincias con la fijación de haberes mínimos “sin consulta” a las jurisdicciones de cada punto del país.
ParticipaciónTRADICIONALMENTE, no ha sido masiva la participación de los docentes en las elecciones de autoridades gremiales nacionales, si se la compara con la que suele darse para los comicios de la Agmer. En las últimas oportunidades, rondó el 25 % la convocatoria de Ctera, contra más del 50 % que se expresó en la renovación del sindicato docente provincial. En estas elecciones hubo una participación cercana al 27 %, superando levemente la media de los últimos años, a pesar de las condiciones climáticas, ya que el mal tiempo jugó una mala pasada, a tal punto que hubo puestos de votación en zonas rurales que no se pudieron habilitar.